Preludio: Un Día Normal

Día 1: Esta semana nos han informado de que nos llegara un cargamento de 527 prospectos, muero de ganas por estudiarlos. Espero que esta generación de sujetos de prueba sea más prometedora que la última.

Día 8: Como me fue prometido una fracción de los pequeños me fue dada para estudiar los efectos de mi personalizado entrenamiento, espero ver resultados en pocas semanas.

Día 486: Al parecer me he vuelto a equivocar con el régimen tan estricto en el entrenamiento de los niños, me sentiría algo decepcionado de no ser por 10 pequeños que han sobrevivido. Como no se sus nombres solo los puedo identificar por su número tatuado.

Día 545: De entre los pequeños me ha nacido un especial interés por el número "VIII”, aunque no ha destacado tanto en sus pruebas físicas parece tener grandes habilidades intelectuales, me parece un espécimen intrigante.

Día 666: Como era de esperarse "VIII" ha acabado con el último de sus compañeros, al parecer lo asesinó mientras dormía ya que en un combate controlado de 1v1 era muy difícil que saliese victorioso.

Día 724: Por lo que eh notado al seguir experimentando con "VIII" es que ha desarrollado una fuerte intolerancia a ciertos tipos de mariscos. Creo que es hora de comenzar a explotar su potencial.

Día 792: Por más que se le ha tratado de enseñarle a "VIII" a manifestar su fuerza interna en la rechaza como si estuviese vacío por dentro, esto es algo que no había contemplado en mis cálculos.

Día 890: No esperaba tener que recurrir a terminar con mi experimento de una manera tan abrupta, pero los datos que me arrojan las pruebas son algo con lo que mis superiores no están dispuestos a tolerar.

Día 950: Este día me despedí de "VIII", y pensar que al principio solo lo vea como un conejillo de indias ahora lo consideró el hijo que nunca tuve es por eso que no puedo matarlo aunque para salvarlo sacrificare no volver a verlo.

Día 957: El cielo se ha oscurecido en pleno día pareciese como si las nubes que aún podemos observar estuvieran en llamas. Han pasado ya casi 7 horas desde que comenzó este extraño fenómeno el cual al parecer nos consumirá, la ciudad es un caos completo creo que somos arquitectos de nuestra propia destrucción mi único consuelo es saber que pude proteger al pequeño “VIII” metiéndolo dentro de la capsula. Espero que el lugar donde la deje no sea afectado por esto.


Meteos, Científico en jefe del Glorioso Imperio de Sólomon.